19.10.2018 – EL CRONISTA (ARGENTINA)
Mónica Vallejos – El equipo del candidato presidencial brasileño Jair Bolsonaro planea ampliar el uso de acciones especiales, conocidas como “golden share” (acción de oro), para viabilizar su programa de privatizaciones estimado en 700. 000 millones de reales (u$s 188. 588 millones). Con un pronóstico de victoria electoral frente al progresista Fernando Haddad en el ballottage del 28 de octubre, el plan de los aliados del ultraderechista es vender el control de unas 150 empresas estatales -un tercio de ellas creadas en los gobiernos de Luiz Inacio Lula da Silva y Dilma Rousseff-, según reportó Folha de Sao Paulo. El objetivo declarado es utilizar los recursos de las privatizaciones para reducir la deuda pública y, al mismo tiempo, limitar la corrupción en las estatales. El valor agregado de la “golden share” sería disminuir la resistencia a las privatizaciones, algo que tienen otros aliados de Bolsonaro, al garantizar el interés del Estado en cuestiones estratégicas. Esa “golden share” o acción exclusiva que el Estado puede imponer al privatizar una empresa estatal fue usada por primera vez en Brasil durante el proceso de desestatización en 1990. De hecho, compañías como CSN, Vale y Embraer fueron privatizadas con esa acción que le da poder de veto al gobierno, incluso en la condición de minoritario, en decisiones como la venta de control o cambio de lugar de la sede, por ejemplo.
Según Folha, la idea está alineada con la posición del grupo de generales que apoyan a Bolsonaro que aceptarían las privatizaciones si se preserva la “soberanía nacional” en áreas estratégicas, como energía.
En el caso de Eletrobras, miembros del equipo de Bolsonaro inicialmente dijeron que llevaría la venta a término. Pero tras discusiones internas, el candidato se retractó de avanzar con la privatización de esa empresa y desistió de hacerlo con Petrobras y Furnas, al menos en el corto plazo. Elegido por Bolsonaro como su eventual ministro de Economía, en el pasado Pablo Guedes se ha opuesto a adoptar la “acción de oro” porque al imponer al comprador derechos limitados sobre la empresa, la acción especial reduce su valor de mercado. Folha detalló que actualmente este debate está sobre la mesa de negociación de Embraer, que en julio recibió una oferta de u$s 4,75 mil millones de Boeing. Cuando Embraer fue privatizada, el gobierno se quedó con una “golden share”. Analistas del mercado estiman que la oferta de Boeing tiene un descuento que va de 30% a 40% debido a la acción especial.